Esta publicación, adoc con los sucesos realizados en el penal del topo chico. Visita nuestras redes sociales, conoce nuestros servicios, escríbenos en http://www.licenciadoserrano.com
Hace tiempo fui víctima de una lacra delincuente en mi propia Casa, dicha persona era familiar cercano, me llegó a destruir y robar algunas cosas personales. Y su madre jamás lo corrigió, bien dicen que desde la niñez te vas formando, y si, es verdad. Su madre ni siquiera lo regañaba a él cuando ocasionaba algún daño al suscrito o alguien más, la excusa de la madre era: “yo no lo voy a exhibir delante tuyo”. No era de que lo exhibiera, solo de que le enseñara a respetar. Considero que el respeto es un valor que te forja muchas formas. Y pues el, nunca aprendió ni le enseñaron dicho valor.
Esto obviamente no fue transcurso de un año, fue durante un largo periodo de tiempo. Cuando ese muchacho era niño, no respetaba sus propios juguetes, rompía sus cosas y las de los demás. Su madre, volviendo a lo mismo jamas le enseño a respetar lo que no es de el.
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Ese muchacho creció, siendo un destructor, sin respeto por nada ni nadie, me atrevería a decir que ni a su propia madre respeta.
Cuando estaba el en edad de secundaria, ese muchacho y otro inseparable amiguito igual de mediocree que el, hicieron lo que ellos creen una travesura, le aventaron piedras a un camión escolar y le quebraron los vidrios, la mama de este sujeto, me contaba esa acción como si fuera un gran chiste, o una gran hazaña de su hijito. Siempre vivía diciendo: «en la colonia siempre cuando pasa algo son Alejandro y Rudy» como si fuera la gran gracia que su hijo y su igual de perdedor amigo hicieran vandalismo en la colonia.
Hoy ese chamaco tiene 20 años, ha estado en la cárcel innumerables ocasiones desde antes de ser mayor de edad, por diferentes faltas y delitos.
A este niño o ya adulto, se le trató de ayudar de diferentes maneras, no solo sacándolo de la cárcel en repetidas ocasiones, también otros familiares, entre ellos su padre, intentaron por todos los medios hacerlo que estudiara, trabajara, que no anduviera en malas compañías.
De hecho la última vez Alejandro estuvo detenido en el municipio de Guadalupe., y supe que su madre había ido a verlo y había llorado por el. (bueno, al menos eso me dijo el papa de Alejandro, que la madre de el le marco al papa), ya lamentablemente, no ganas nada con llorar. No lo corrigió en su momento, menos ahora que es un adulto.
Así como la madre de esta lacra, hay muchas. Con esa energía con la que ahora se paran en los penales hubieran educado a sus hijos. Y ahora no estarían dentro.
No es cierto que la mayoría de los que están adentro son inocentes, como tampoco es cierto que todos son culpables, lo que si es verdad es que nadie los obligó a quebrantar la ley o hacer daño al prójimo. Si tu obras mal, no puedes esperar recibir, como los religiosos dirían, bendiciones.
O usted que opina mi querido lector?
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